Este fin de semana no he parado ni un momento ya que he estado haciendo dos tartas. La primera tenía que ser original así que, después de darle muchas vueltas, mi cuñada y yo decidimos que lo mejor era "esconder" el regalo en la tarta, rodeado de cupcakes. Este fue el resultado:
Los cupcakes son de chocolate con buttercream de plátano y en el centro, está la caja que contenia el regalo cubierta con fondant.
Mi cuñada tuvo que trasladarla en coche y yo estuve sufriendo hasta que me confirmó que todo había llegado en su sitio. ¡Es la primera vez que una de mis tartas viaja tantos kilómetros!
La segunda tarta era para mi sobrina y como le encantan las princesas no tuve ninguna duda: la tarta iba a ser una muñeca con su vestidito de princesita.
Dar forma a los bizcochos fue bastante fácil. El problema llegó al cubrirlos con el fondant. El primer intento no me gustó nada, así que me tocó repetir y esa vez si que quedó como yo quería.
Nadie sabia cómo iba a ser la tarta así que todos se quedaron boquiabiertos al verla, sobretodo los niños. Mi sobrina se quedó fliplada y a mi sobrino le gustó tanto ¡que pidió una de cars para su cumpleaños!